La nadadora catalana Andrea Fuentes, componente del equipo olímpico español en Pekín, se ha proclamado este miércoles como subcampeona del mundo. La medalla de plata ha sido para la atleta en la modalidad de solo libre de Natación Sincronizada de los Mundiales de Shanghái.
La segunda posición de esta final se suma a los tres bronces conseguidos con anterioridad. Pero es la primera vez que Fuentes consigue una medalla como solista en un campeonato del mundo. Ahora, en esta ocasión y durante el ejercicio individual artístico, la española ha superado a la nadadora china Sun Wenyan, con un total de 96.520 puntos. De todos modos, el oro se ha ido para la rusa Natalia Ischenko que, con 98.550 puntos, se ha alzado con su cuarta medalla de oro en estos campeonatos.
Andrea Fuentes ha logrado su triunfo en la rutina con la que también consiguió la segunda posición en el Campeonato Europeo de Budapest. Esta vez lo ha hecho con el sonido de la canción “Non, je ne regrette rien”, de la famosa cantante francesa Edith Piaf, quien comparte nacionalidad con la madre de la atleta.
La sustituta de Mengual, que ha sabido encontrar su propio lugar en la piscina, ha aportado la primera medalla de plata para España, que vuelve a subir al podium de los vencedores gracias a las mujeres de Natación Sincronizada. El ejercicio es una creación de la propia nadadora, quien ha demostrado una fuerza espectacular, un carácter extraordinario en el agua y una mirada fascinante y expresiva.
El debut de la catalana no ha podido resultar más generoso y la nadadora ha salido de la piscina llorando por la emoción de su conquista.