Afrontémoslo, las vacaciones ya son historia. Atrás quedaron los días de descanso con la familia y los amigos. Los chiringuitos, los bañitos en el mar, los paseos al anochecer junto a la playa, las noches de baile hasta el amanecer…el verano 2011 tocó su fin y ahora saboreamos su recuerdo.
Ya hemos vuelto a nuestra rutina, a nuestra casa, a nuestro trabajo, a nuestro día a día. Quizá sea un buen momento para hacer algunas cosas que a lo largo del año pasamos por alto por falta de tiempo o por falta de ganas. Ahora hemos vuelto con las pilas cargadas y es momento de pasar nuestra ITV personal.
Hoy vamos a resumir algunas de estas tareas que sería aconsejable realizar ahora a la vuelta de las vacaciones para así asegurarnos que, al menos una vez al año, las realizamos.
Vamos a ello:
– Visita al dentista: para mantener una salud bucodental adecuada, debemos visitar como mínimo una vez al año al dentista para una revisión y limpieza dental. Quizá tengamos un inicio de caries que podamos solucionar fácilmente ahora que es algo de poca índole, o puede que tengamos las encías inflamadas o algún empaste desgastado. Una visita al dentista nos revisará todos estos posibles problemas y nos evitará disgustos posteriores. Si eres como yo y le tienes pánico al dentista, “oblígate” a ir una vez al año siempre en la misma época, y después del verano es un buen momento.
– Limpieza de cutis: después de las jornadas en la playa o la piscina, la piel vuelve más morena y lucimos un color precioso, pero eso no significa que la piel no haya sufrido por su exposición al sol Ahora es un buen momento para hacernos una limpieza facial y empezar la nueva temporada con el cutis resplandeciente.
– Visita al podólogo: no nos damos cuenta de lo importante que son los pies hasta que no nos duelen. En verano sufren por las grietas producidas por las sequedad y por los tacones de infarto de las sandalias. Ahora es un buen momento para pedir cita con el especialista y que nos revise los pies que a tantos sitios nos tienen que llevar durante el resto del año.
– Análisis de sangre: si hace mucho que no te haces una analítica, quizá sea un buen momento para comentárselo a tu médico de familia y valorar la posibilidad de realizarla. La detección precoz de una anemia, un colesterol alto o un índice glucémico elevado puede ser fundamental para que no se convierta en algo serio.
Ya ves, no solo los coches tienen que pasar la revisión anual.