Con esto de la crisis cada vez más mujeres se hacen sus propias mascarillas en casa, algo que ya hacían nuestras abuelas y nuestras bisabuelas antes de que existiesen las marcas low cost. Es por eso que en esta entrada os voy a enseñar cómo haceros vuestra propia mascarilla casera de avena, una mascarilla que ayudará con los puntos negros y las espinillas.
La avena, como muchas sabréis, es una de las cosas que más nutren y favorecen a nuestra piel y es porque tiene propiedades hidratantes y emolientes. Pero no es todo, ya que también nos ayuda a calmar las irritaciones de la piel. Así que nada chicas, al lío.
Ingredientes
· Cuatro cucharadas de harina de avena (la podréis encontrar en herbolisterías)
· Una cucharada de miel
· Una clara de huevo
· Tres gotitas de zumo de limón
Elaboración
Esta mascarilla es muy fácil de hacer ya que solo tenemos que mezclar todos los ingredientes de arriba hasta que logremos formar una mezcla homogénea. Una vez que tengamos todo bien mezclado y homogéneo, la aplicaremos por el rostro con una brocha (es mucho más cómodo que con las manos) y la dejamos actuar durante, al menos, 30 minutos.
Después de esperar esos 30 minutos, procederemos a aclararnos la mezcla con agua tibia y nos daremos una pasadita, al final, con agua fría para activar la piel. Como veis es muy sencilla de hacer y de aplicar, así que es algo que os recomiendo hacer al menos una vez al mes.