Hoy vengo con una noticia bastante triste y dura de contar, y es que hace muy pocos días que falleció Loulou de la Falaise tras una larga enfermedad. Loulou, para las que no las conozcáis, ha sido la gran musa de Yves Saint Laurent, una mujer muy fuerte, muy trabajadora y luchadora, y es que, según comentó ella misma en muchas ocasiones, trabajaba desde las nueve de la mañana hasta las nueve de la noche, incluso a veces se quedaba hasta las dos de la madrugada diseñando joyas.
Loulou pertenece a una familia aristocrática inglesa, siendo su padre conde y su madre modelo. El padre de Loulou era editor, escritor y, además, traductor y su madre, como ya os he dicho, modelo.
Siguiendo con su trayectoria, en el año 1960, Loulou se trasladó a Nueva York, donde posó para Vogue. También trabajó para Halston y poco tiempo después pasó a ser editora de una revista británica, que fue cuando conoció al diseñador Yves Saint Laurent. A partir de ese momento se hacen grandes amigos hasta hoy día, que los dos han fallecido.
En el año 1972 se traslada a la capital de la moda, a París, para trabajar con YSL como diseñadora de joyas, trabajando codo con codo.
Finalmente, cuando el diseñador decide retirarse en 2002, ella decide también dejar el trabajo que tenía desde 1972 y empieza a hacerse una carrera independiente, su propia firma. Abrió dos tiendas en París y ha estado colaborando con otros diseñadores, pero siempre como diseñadora independiente.
La verdad es que Loulou ha tenido una vida apasionante, tanto profesional como personalmente, así que es una gran pérdida la que hemos tenido en este mes. Eso sí, siempre la recordaremos.