Para los creadores de esta red social no es importante la cantidad, sino la calidad, es por ello que la única manera de acceder a Elysiants sea por invitación, y pagando la módica cantidad de 5.000 dólares (algo más de 3.000 euros). La cantidad de usuarios no preocupa en exceso a los creadores, y en vez de ser una red abierta se definen como cerrada.
De esta manera, si se pertenece a la misma se podrá comunicar con actores, futbolistas de élite, directores de grandes compañías por todo el mundo y multimillonarios.
A través de la red podrás contactar con usuarios de nuestro mismo perfil, que nos recomendarán y compartirán los sitios más exclusivos, el restaurante del chef más afamado, hoteles, eventos, entretenimiento, relatar sus experiencias al frente de un determinado coche de alta gama, cenas en exclusivos yates, o su marca favorita…, eso sí, curiosamente, esta red social no se ha presentado todavía en las tradicionales capitales del lujo, como son París o Nueva York, sino en la geografía que los creadores definen como “del nuevo mundo”, aquellos que consideran de mayor potencial: Buenos Aires, Panamá, Miami o Santo Domingo. Con fiestas hiper-exclusivas, Elysiants ya ha sido presentada en Estambul, Beirut, Dubai, Hong Kong, San Pablo y Abu Dhabi.
Nada más entrar en su página web encontramos una clara explicación de porqué su denominación: A las hormigas (“ants” en inglés) se las conoce por sus colonias altamente organizadas; a los elysiants, por su fortuna”. La misión de Elysiants es la de permitir a sus exclusivos miembros, la oportunidad de celebrar el lujo de su estilo de vida y de poder comunicar y compartir sus experiencias con personas de su misma pasión y capacidad financiera en todo el mundo.
Existen otras iniciativas similares en la red como son aSmallWorld, con apenas 300 mil usuarios y bajo invitación; Diamond Lounge, club privado online para conocer gente y buscar pareja de forma exclusiva y sofistica y; Squa.re, plataforma de TV online con contenidos generados por la comunidad con el lujo y el estilo de vida como tópicos excluyentes; etc.
La red social no deja de ser un reflejo de la sociedad, y esta iniciativa que parece tan vanguardista, no es sino una copia digital de tantos y tantos clubes sociales que inician una andadura selecta, desvirtuada con la falta de valores y verdadera educación que vivimos.
Imagen: Elysiants