A menudo compramos gafas de sol del mismo modo en que adquirimos complementos de moda, teniendo más en cuenta su estética que la función que van a desempeñar. Pero no hay que olvidar que el aspecto más importante es la protección que ofrecen frente a las radiaciones nocivas. De hecho, el uso de gafas de sol resulta imprescindible para prevenir diversos daños, tanto en el ojo como en el área circundante.
El asesoramiento de un óptico-optometrista nos garantizará que elegimos las lentes más adecuadas, que no tienen que ser necesariamente las más caras. Aunque las gafas de sol de las grandes firmas normalmente destacan por su alta calidad, modelos más asequibles también garantizan una alta protección, al tiempo que ofrecen una visión libre de distorsiones.
El uso de las gafas de sol ofrece las siguientes ventajas:
Protección frente a la radiación ultravioleta. La exposición prolongada a la radiación ultravioleta de sol incrementa el riesgo de sufrir cataratas, tumores benignos, cáncer de párpados y fotoqueratitis, que es una quemadura de la superficie ocular. Los sobreros y las gorras solo bloquean alrededor del 50% de esa radiación, por lo que su uso no es suficiente.
Protección frente a la luz azul. A largo plazo, la exposición a la luz visible del espectro solar se ha identificado como un factor de riesgo de la degeneración macular, especialmente en personas sensibles al sol.
Comodidad visual. El brillo y el deslumbramiento producido por el sol perjudican la claridad de visión, haciendo que entrecerremos los ojos y provocando un lagrimeo excesivo.
Adaptación a la oscuridad. Pasar dos o tres horas bajo la luz directa del sol puede dificultar la habilidad de los ojos para adaptarse rápidamente a niveles de iluminación inferiores o por la noche. Esto puede hacer que, tras pasar un día al sol, la conducción nocturna resulte un poco más peligrosa.
Utilizar gafas de sol que no ofrecen protección ultravioleta puede ser más dañino que no llevar nada, ya que hacen que la pupila se dilate, aumentando la vulnerabilidad de los ojos frente a las radiaciones nocivas.
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Fuente: Consejos de tu Óptico – Optometrista