A la hora de hacer la cena siempre nos pensamos más que preparar que a cualquier otra hora del día, y es que la cena es la comida que más quebraderos de cabeza nos da, y es que en esta hora del día no tenemos mucha hambre, pero tampoco nos podemos ir a la cama sin haber cenado, por lo que, normalmente, se opta por algo rápido y calórico, por las pocas ganas de cocinar que solemos tener después de un agotador día de trabajo.
Pues bien, hoy quiero hablar de eso mismo, de la importancia que tiene la cena y la importancia de hacer las cenas ligeras, ya que no es nada sano cenar frituras y grasas saturadas a diario.
La última comida del día
La cena, como bien sabéis, es la última comida del día que solemos hacer, por lo que, normalmente, nuestro cuerpo no tiene tanta necesidad de ingerir alimentos como en el desayuno, por lo que un motivo para realizar cenas ligeras es que nuestro cuerpo no nos pide tanta comida y si se la damos, este estará muy pesado, lo que nos lleva al segundo motivo.
Cuando llegamos a la cena, normalmente, ya hemos consumido todos los nutrientes que nuestro organismo necesita, lo que no significa que tengamos que darle lo que realmente no necesita, que son las grasas saturadas.
En la siguiente entrada seguiremos con más motivos para realizar cenas ligeras, no os la perdáis, seguro que os resulta muy útil para vuestro día a día.