Trajes de Alta Costura, joyas sin igual, moda, elegancia, lujo, estilo… y podríamos seguir en adjetivos de similar estilo para catalogar lo que se pudo ver anoche.
Pero centrémonos en lo que he venido a contaros. Y es que, como no podía ser de otra manera, tras el papelazo que ha hecho en “Los Miserables”, Anne Hathaway fue una de las grandes protagonistas de la noche. Al igual que yo debió pensar ella, porque estaba más que claro que se llevaría el Oscar a la mejor actriz secundaria y, probablemente por eso, eligiese un elegante vestido de Prada que realzó su belleza natural.
Como podéis observar en la imagen, el modelo de Prada era color rosa palo, con un bonito escote acompañado de un collar de pedrería que iluminaba el vestido… y que al mismo tiempo tuvo la mala suerte de jugarle una mala pasada a Anne, ya que el susodicho escote marcaba algo más de lo que debía (sí, sí, los pezones, pero para eso son suyos ¿no?).
Fuere como fuere, Hathaway estaba radiante con su estatuilla con la que posó ante las cámaras completamente emocionada y orgullosa del premio que acababa de recibir.
¡Enhorabuena Anne!
Imagen: ellahoy