Entre la semana 14 y la 18 aparecen los primeros movimientos fetales. La bolsa de líquido amniótico mantiene al feto protegido de los golpes y le permite moverse con libertad, girar la cabeza y estirarse. Ya se han formado las cejas y la nariz, el pelo de la cabeza se hace más grueso. El oído finalizado su formación y continua la maduración del sistema nervioso central.
El crecimiento promedio del feto, que era de 1,2-1,5 centímetros por semana pueden llegar a ser en este momento de 2,5 centímetros por semana. Un hecho a destacar en la semana 15 es que la médula ósea ya puede ser productora de células de la sangre. Pesa de 90 a 110 gramos y mide de 15 a 20 centímetros.
Quinto mes
Madura el sistema nervioso y sus reflejos se ponen en funcionamiento. Por eso, además de dar patadas y agarrar, empieza a chuparse el dedo. Aparece una fina capa de vello en la piel (lanugo), además de las pestañas y las cejas. También se cubre de una grasa blanca que protege la piel (vernix caseosa).
Duerme de 18 a 20 horas diarias. El árbol bronquial ya está casi completo. A las 19 semanas los movimientos fetales, la actividad respiratoria y la frecuencia respiratoria siguen ciclos diarios llamados ritmos cardiacos. En la semana 20 la cóclea del oído ya tiene el tamaño adulto, por lo que el feto responderá a una gama de sonidos mayor. Pesa de 245 a 280 gramos y mide 25 centímetros.
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