El suceso ha ocurrido en Amarousin, al norte de Atenas (Grecia), y, como podéis apreciar en la imagen se trata de la imagen de un bebé recién nacido en el interior de la bolsa amniótica sin romper, aun conectado por el cordón umbilical al cuerpo de su madre.
Personalmente no sé si a mí me gustaría que hiciesen eso con mi bebé recién nacido. Pero la cosa es que el médico no tuvo reparos en coger su cámara o móvil, lo que fuera, para sacar bastantes imágenes del bebé colgarlas de inmediato en su perfil de Facebook.
El parto, que fue mediante cesárea, provoca que para el bebé el proceso sea menos doloroso ya que el agua hace de cojinetes sobre su cabeza. Además, el bebé se sigue manteniendo como si estuviese dentro del vientre materno puesto que no sentirá la necesidad de respirar hasta que se le saque del interior del saco y el oxígeno le sigue llegan a través de la placenta.
Los comentarios del médico, al subir las imágenes son los siguientes: “Es un recién nacido, todavía en el saco. Es una oportunidad asombrosa de ver algo tan raro. ¡No puedo creer cómo está dentro de ello! ¡Asombroso!”. Este efecto se conoce como “nacimiento velado”, aunque el doctor Tsigris lo ha titulado como “El bebé que no sabía que había nacido“.
Imagen: esrealidad