Aunque es cierto que hay varias frutas con poquísimas calorías, siempre hay una que tiene menos y siempre es bueno saberlo, ¿No creéis? A pesar de que la fruta con menos calorías no es de las más apreciadas a la hora de comer un postre o un tentempié, sino más bien para aderezar la comida.
Se trata del limón, que tan solo tiene 29 kcal por cada 100 gramos, con piel. Le sigue la fresa, con 32 kcal, la sandía con 33 kcal y el melón con 36 kcal. La cuestión es que el limón no solo tiene pocas calorías, sino que también nos ofrece muchísimas propiedades, desde curativas hasta antioxidantes.
Lo primero que tenemos que decir es que tiene un índice glucémico muy bajo, de 30, y cuenta con una cantidad de fibra que ni os lo creeríais, vamos, que si tenéis algún tipo de problema digestivo, el limón es vuestra solución. Por otra parte, ya sabéis que el limón tiene un sabor ácido que es el motivo por el que muchas personas lo rechazan, y esto se debe al ácido cítrico, que nos ayuda con la digestión y a disolver los cálculos renales.
Además de esto, es una fuente de vitamina C genial. La vitamina C nos ayuda a desarrollar resistencia contra agentes infecciosos y a eliminar los radicales libres dañinos que podamos tener en el organismo. También tiene efecto antioxidante y anti-inflamatorio, gracias a la naringenina, acelera el metabolismo y nos aporta unas cantidades importantes de hierro, cobre y potasio.
Como podéis ver las propiedades del limón no son pocas, además de que las calorías son mínimas, por lo que os recomendamos que aliñéis ensaladas con limón, lo añadáis a las comidas o le añadáis una rodaja de limón a vuestra bebida.