Las mujeres cada vez retrasan más el momento de tener hijos. Según datos del último informe del INE, la edad media para ser madre en 2013 fue 32,7 años y la maternidad después de los 40 ha aumentado un 27%. El año pasado 35.666 mujeres fueron mamás después de esa edad.
La edad también aporta madurez y al mismo tiempo que vemos incrementarse la edad para quedarse embarazada detectamos una mayor preocupación de la mujer por cuidarse durante los meses de gestación. Estos cuidados pasan desde llevar una dieta sana hasta practicar deporte.
Disciplinas como el Pilates para embarazadas se han puesto de moda y cada vez son más las mujeres que se acercan a centros de fisioterapia como Kinesa para recibir clases especiales para su estado, con la intención de recibir un trato profesional y adecuado para afrontar esta nueva etapa tan importante, como es la gestación.
A partir del primer trimestre y con autorización de su médico, las embarazadas pueden practicar este método de entrenamiento. “En Kinesa, nos preocupa especialmente este colectivo, ya que durante el embarazo se producen múltiples cambios en el cuerpo de la mujer; por eso nosotros ayudamos a facilitar este cambio de la mejor manera posible de tal forma que están mejor preparadas para la llegada del bebe”, nos explica Carmen Muñoz Mayordomo, fisioterapeuta del centro.
Las clases son impartidas por fisioterapeutas especializados en preparto y el objetivo de las mismas es mejorar y mantener la movilidad sobre todo de la zona pélvica y de la columna vertebral. Se le da especial importancia a la respiración y a la tonificación de brazos y piernas.
“Nuestras alumnas afirman encontrarse mejor desde que practican Pilates, se sienten más ágiles y con más energía especialmente el día que vienen a clase y los posteriores”, asegura Carmen. “Más del 70% vinieron recomendadas por amigas/compañeras que se lo habían aconsejado y el 20% recomendadas por su especialista”, añade.
Las clases de Pilates para embarazadas difieren mucho de las clases de Pilates normal, por ejemplo no es aconsejado para las embarazadas permanecer mucho tiempo tumbadas boca arriba, especialmente en el último trimestre y mucho menos realizar ejercicios. La respiración es diferente además que las embarazadas no contraen los abdominales. El trabajo en isometría también está desaconsejado porque congestiona a nivel circulatorio. Por tanto es muy positivo que las mujeres embarazadas busquen centros especiales y a los mejores profesionales.
