Renée Zellweger nos tiene más que acostumbradas a sus radicales cambios de look, especialmente en lo que a pesos respecta pero, tras su aparición en los premios Elle recientemente celebrados en Los Angeles, la actriz nos ha dejado sin palabras. ¡Sí parece Jennifer Aniston! ¡No, Antonia San Juan!
Diréis que soy mala, pero nada más lejos de la realidad. Me importa un pimiento las operaciones de cirugía estética a la que se sometan las famosas, pero esto de los cambios radicales me asusta. Pasan de tener su rostro para convertirse en personas incapaces de tener expresividad de tanto lifting, por poner un ejemplo, prestad atención a Nicole Kidman). Pero vaya, que la muestra de Renée es… ¡la leche! Por no decir otra cosa.
Mis conocimientos quirúrgicos son escasos, pero lo único que he podido sacar en claro es que se ha tenido que tocar la mandíbula. ¿Limarse la mandíbula genera semejante cambio? ¡Ni idea, pero parece que sí!
Esta mujer, que conocimos a través del Diario de Bridget Jones como personaje con tendencia a engordar y carita redondeada, es una actriz de los pies a la cabeza. De hecho, fue premiada con un Oscar a mejor actriz secundaria por su papel en Cold Mountain, donde aparecía junto a la actual robótica Nicole Kidman. Además, también ha sido candidata a obtener su segundo Oscar como actriz principal en Chicago y la ya mencionada película de El diario de Bridget Jones.
Luego, ¿qué ha llevado a Renée a someterse a este cambio? Tampoco lo sé, pero todo indica que a la chica no le gustaba su cara y, ¡tachán, me la cambio! ¿Os haríais vosotras un Renée Zellweger?
Fotos | 20 minutos