11.00 horas
La mejor hora del zumo de frutas es a media mañana porque, además de rehidratarte, combate las eventuales bajadas de azúcar tan frecuentes a esa hora. En esta época son ideales los zumos de cítricos (naranja, mandarina, pomelo), de granada y de uva (mosto blanco o negro).
También puedes recurrir a los zumos de verduras como el de zanahorias o tomate. Además, para apagar el gusanillo del hambre, prueba a tomar batidos de soja y frutas, o simplemente bebe 1 vaso de leche de soja.
Y si necesitas una inyección de energía, “infusiónate” a media mañana. Elige la opción que más te guste:
- Infusión de canela jengibre y clavo. Pon en 2 tazas de agua hirviendo 2 clavos, 1 rama de canela y una punta de cuchara de jengibre en polvo. Filtra antes de beber.
- Infusión de gingseng.
- Infusión de menta.
13.00 horas
Antes de comer (lo ideal sería media hora antes), para evitar tener que beber mientras se come, es recomendable tomar 1 vaso de caldo depurativo con el zumo de medio limón. Eso prepara el aparato digestivo para digerir mejor los alimentos.
14.00 horas
Aquellas personas que no puedan comer sin beber, la mejor opción es agua natural sin gas y a pequeños sorbos. Pero hay que intentar comer despacio y masticar bien los alimentos, de esta manera desaparecen las ganas de beber o se bebe menos.
- En invierno, las sopas, consomés y caldos son una buena opción de primero que aumenta el contenido hídrico de la dieta. Además resultan muy saludables si no llevan grasa animal. Cuando hace calor, el gazpacho es una excelente alternativa.
- Si quieres engordar, toma durante la comida o al final de la misma 1 vaso de mosto o de zumo de manzana.
- Si te gusta el vino, toma 1 vasito antes de comer. Su riqueza en antioxidantes y protectores cardiovasculares justifica su consumo a muy pequeñas dosis.
Foto | trieu88
Qué beber en cada hora del día: primera hora – Qué beber en cada hora del día: tarde
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