Según han explicado testigos directos, los Príncipes de Asturias y dos hijas aprovecharon la tarde del pasado viernes para irse de compras por el centro de Madrid.
A eso de las cinco de la tarde, Letizia Ortiz acompañada de sus dos hijas, Leonor y Sofía, acompañadas por su guardaespaldas entraron en el establecimiento Tiger, conocido por sus productos de decoración ‘lowcost’.
Una vez situadas en la cola para abonar sus compras (gastos que asumimos con nuestros impuestos), a Doña Letizia le pareció que un cliente miraba atentamente su móvil para sacarle unas fotos.
Fuentes presenciales aseguran que Letizia arrebató de malas maneras el teléfono al joven que lo portaba dejando perplejos a los allí presentes.
«Cuando la Princesa se percató de que el chico llevaba el móvil en la mano, rápidamente se fue hacia él y se lo quitó. Estaba muy nerviosa y no paraba de decirle que no le hiciese fotos y menos a las niñas», declaraba una de las personas que pudieron observar el suceso, quien además añade: «Cuando el chico le explicó que no estaba haciendo fotos, sino leyendo sus e-mails, y le pidió por favor que le devolviese el teléfono, ella le dijo que solo se lo devolvería si le enseñaba las fotos que había hecho. Fue un momento de tensión que finalmente se aclaró cuando él, tras negarse en un principio a enseñarle el contenido multimedia de su dispositivo, le terminó demostrando que ni había fotos ni intención de hacerlas».
Imagen: actualidad.orange