Puede que no todas, pero la gran mayoría de nosotras ha jugado, y tenido claro está, alguna que otra Barbie. Este hecho no es bueno ni malo, pero empezar a creer que las medidas perfectas para nosotras son los de la muñeca de Mattel ya es otro cantar. Y lo peor no es sólo que nos lo creyéramos nosotras, sino que la sociedad se convenza de ello y ‘nos exiga’ ser igual que la muñeca… algo físicamente imposible a no ser que estés enferma (y no lo digo en tono peyorativo). Menos mal que a día de … [Read more...]