El nuevo hijo de Borja Thyssen y Blanca Cuesta ha hecho que la baronesa, Carmen Cervera, diese un paso adelante y echara pelillos a la mar. Decidida a conocer a su nuevo nieto, el tercero de la pareja, la abuela se adentró en la Clínica Ruber, donde su nuera acaba de dar a luz a Enzo Thyssen.
Sin embargo, Tita se ha tenido que marchar si cumplir con su objetivo. No ha visto al niño y algunos malmeten y aseguran que la decisión ha sido de los papás. De este modo, la baronesa ha podido estar con su hijo, pero no con su nieto y, según se comenta, tampoco ha hecho el menor gesto que nos permita deducir que deseaba ver a su nuera.
Carmen Cervera, que tiene abierto un proceso judicial contra la pareja, parecía así querer acercarse a su hijo, con quien no se habla desde hace dos años. De hecho, hace tan solo unos días, la propica Tita sorprendía a todos invitando a ambos al aniversario del Museo Thyssen, e incluso se especuló con la posibilidad de retirar la demanda.
Sin embargo y a pesar de que la baronesa Thyssen ha pasado una hora en la clínica, en compañía de su hijo; las cosas no parecen haber funcionado como a ella le hubiese gustado y se ha vuelto a casa sin conocer al bebé. Al parecer, la única condición que pone su hijo Borja para que las aguas vuelvan a su cauce es que su madre respete a Blanca Cuesta.
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