A pesar de que cuidamos nuestra piel a diario, hay una parte de nuestro cuerpo a la que siempre le hacemos menos caso y, además, esa misma zona es una de las más complicadas para cuidar. Se trata del cuello y de la papada, la zona que, quizá, hace que luzcamos mejor o pero, ya que el contraste es muy grande cuando tenemos una cara y un escote cuidado y un cuello flácido. Por este motivo hoy vamos a ver algunos cuidados, unos cuidados muy sencillos.
Vamos a empezar diciendo que es muy importante aumentar la renovación celular del cuello, es decir, si nos hacemos un peeling en la cara porque la notamos apagada y triste, en el cuello debemos realizar el mismo proceso y con los mismos ingredientes ya que funciona igual. Claro que no todos los días podemos hacernos un peeling facial, ya que es demasiado agresivo para la piel, pero lo que si que debemos tener (y seguro que tenéis todas) es una rutina de limpieza facial diaria. Pues bien, en esa rutina tan solo tenemos que añadir un paso más y es pasar por el cuello y la papada unas toallidas, así desaparecerá toda la suciedad que acumulamos durante el día.
Por último, hablando de la hidratación, podemos usar la misma crema que usemos para la cara, tanto de día como de noche, tan solo tenemos que extender la crema un poco más abajo. Creo que no cuesta demasiado hacerlo y que tampoco se pierde mucho tiempo, un minuto más a lo sumo, así que esto es algo que os recomiendo hacer a todas para cuidar de vuestro cuello y de vuestra papada.
¿Tenéis algún consejo más?