Todos conocemos las fiestas de Navidad como una época de excesos, y es que entre las cenas, las comidas, las visitas, que si el turrón, los polvores, los bombones de chocolate…, vamos, que no comemos más porque no podemos, sino seguro que lo haríamos. Pues bien, para poder mantener la línea en esta época (algo difícil pero no imposible) os traigo hoy unos pequeños consejos para no subir de peso, o por lo menos lo menos posible.
Lo primero que debemos tener en cuenta es que debemos controlar la cantidad de comida que consumimos. En estas cenas o comidas se suele comer deprisa, por lo que el cerebro no recibe la información de que estamos hartos hasta mucho después, lo que hace que comamos más cantidad de comida cuando nuestro estómago ya está lleno.
Lo segundo es que no vale saltarse comidas porque luego vamos a cenar mucho. Debemos hacer todas las comidas del día, sea la comida o la cena el momento en el que más comeremos. Os recomiendo que en el resto del día comáis como siempre, si estáis a dieta pues lo que os corresponde ese día, y sino lo estáis lo que comeríais siempre. En cuanto a los alimentos de esa comida copiosa, yo os recomendaría comer más verdura y cosas sin tantas calorías que lo contrario, es decir, si podemos mejor comer pollo o pavo que cerdo, lo que no quita que nos demos un homenaje y comamos algo con un pelín más de calorías.
Lo tercero y último son las bebidas. Debéis tener mucho cuidado con el alcohol y las bebidas con gas. Personalmente os recomendaría que si vais a beber alcohol no probéis las bebidas con gas hasta la mezcla, ya que así no tendremos tantos gases luego. Si no vais a tomar nada de alcohol, podéis tomar algún refresco, pero eso sí, con moderación.
Siguiendo estas pautas que os digo no cogeréis ni un gramo, es más, si normalmente coméis mal, esto os puede ayudar incluso a perder peso.
Foto Viviendosanos