Los síntomas más comunes del síndrome premenstrual (SPM) son el aumento de peso, pechos sensibles, fatiga, dolor, ansiedad, dolor de cabeza o falta de concentración. No todas las mujeres lo sufren pero sí la mayoría. Se trata de síntomas físicos, psicológicos y de comportamiento que sufrimos entre 7 y 10 días antes de la menstruación.
Además, si eres una mujer perimenopáusica, los síntomas pueden persistir durante y después de la menstruación. El SPM se relaciona con cambios en los niveles de las dos hormonas producidas en los ovarios, los estrógenos y la progesterona además de la serotonina (“mensajero” químico relacionado con el estado de ánimo. La depresión se debe en gran medida a excesivos bajos niveles de serotonina). Además, los estrógenos y la progesterona puede ser la causa de la retención puntual de líquidos, lo que altera el equilibrio electrolítico del cuerpo femenino.
Debido a estos desequilibrios hormonales nos da por comer cosas dulces, sobre todo, chocolate ya que incrementa de manera natural los niveles de serotonina por lo que mejora nuestro estado de ánimo.
No es la única sustancia que necesita “refuerzo” en la mujer. También se recomienda mejorar los niveles de vitamina B6, que también participa en la producción de serotonina. La encontramos en el pescado, las judías verdes y plátanos.
Actualmente se recomiendo incrementar la ingesta de calcio y vitamina D en este período. Se ha demostrado que el calcio puede reducir un 50% los síntomas de SPM. La vitamina D, por su parte, es necesaria para la absorción del calcio. Si llevamos una dieta pobre en grasas podemos presentar deficiencia de vitamina D; en estos casos debemos tomar leche con enriquecida con dicha vitamina.
Para llevar lo mejor posible el SPM debemos intentar reducir el estrés, llevar una dieta equilibrada que potencie el consumo de lácteos ricos en vitamina D y reducir la ingesta de sodio para contrarrestar la retención de líquidos.
Imagen: saludnaturalybelleza
Fuente: nestle