No solo nos sometemos a la cirugía plástica para superar los complejos o porque nos apetece mejorar algo de nuestro aspecto sin más. Según una encuesta realizada a pacientes que se sometían a cirugía estética revela que el segundo motivo por el que deciden someterse a estas intervenciones es para conseguir una mejor posición de salida en el mercado laboral.
La encuesta, realizada por la Sociedad Catalana de Cirugía Plástica Reparadora y Estética (SCCPRE), revela que aunque la satisfacción personal sigue siendo el motivo fundamental para someterse a una operación de cirugía estética, un 30% de las personas encuestadas considera que el ámbito laboral es donde más se verán beneficiados con el cambio físico que se van a realizar. Se superan así los porcentajes de las relaciones íntimas (13%) y sociales (5%).
Para el 22% de los pacientes ha sido el entorno laboral los que les ha dado el empujoncito final para someterse a la operación, con mayor influencia que la de los familiares o amigos (17%). Según esta encuesta la pareja prácticamente no tiene influencia en este tipo de decisiones (menos del 1%).
El 62% de los pacientes encuestados revela que su objetivo es conseguir un cambio en la cara (nariz, párpados, orejas, lifting, etc.). El segundo puesto (21%) lo ocupa la cirugía mamaria, ya sea para aumentar o reducir el tamaño de los senos. Y el tercer puesto, con un 19%, lo ocupa el contorno corporal y el abdomen.
La encuesta reafirma que somos las mujeres las que más nos preocupamos por el aspecto físico (solo un 5% de las visitas son masculinas) y el rango de edad más común oscila entre los 45 y los 60 años. De los datos extraídos de esta encuesta se deduce que el 65% de las personas que se han operado lo han hecho en más de una ocasión y que, además, son pacientes recurrentes.
Imagen y fuente: hoymujer