Ya se sabe que las almendras son buenas para la salud al ser ricas en proteínas, minerales y vitaminas A, B y E, pero también nos ayudan a estar guapas cuidando de nuestra piel.
El aceite de almendras es un excelente hidratante para la piel que conviene aplicar después de cada ducha, con la piel húmeda, y secando después con una toalla. Así aprovecharemos todas sus propiedades además de nutrir, ayudar a combatir las inflamaciones cutáneas y calmar las irritaciones.
Además de para suavizar e hidratar la piel, el aceite de almendras es muy útil como emoliente y como prevención de la aparición de las temidas arrugas. También es muy útil con las pieles estriadas ya que, además de hacer menos visibles las estrías, contribuye a que no aparezcan.
Otro buen uso que podemos darle al aceite de almendra es en aromaterapia. Podemos diluir esencias o aceites esenciales para realizar masajes y aplicar en baños de hidratación o nutrición.
Además, el aceite de almendras tiene magníficas propiedades para el cabello maltratado o castigado, ya que con su uso se recupera el brillo y la suavidad. Para ello, es conveniente aplicar dos cucharadas distribuidas por el cabello antes de lavarlo y dejarlo una hora envuelto en una toalla para que se nutra bien, pasando posteriormente a lavarlo con un champú neutro.
Pero esto no es todo puesto que al aceite de almendras se le atribuyen también propiedades para la salud relacionadas con el aparato digestivo, además de presentar propiedades laxantes. Eso sí, su utilización para estos fines ha de ser siempre bajo control médico.
Imagen: blogspot
[…] humedecer el azúcar con un poco de agua, pero también podemos hacerlo con jugo de áloe vera o aceite de almendras dulces para que sea más eficaz. Mejor que mejor si después nos envolvemos las manos con unas toallas […]