Ya hemos visto alguna que otra mascarilla casera para poder reducir las odiosas líneas de expresión que nos salen con el paso del tiempo y que ninguna de nosotras queremos tener en nuestro rostro, aunque es inevitable. Hemos conocido la mascarilla de papaya y la mascarilla de plátano, así que hoy nos toca conocer la mascarilla de tomate.
Sí, de tomate, y es que tenemos el tomate como una verdura, cuando realmente es una fruta. Así que nada, si queréis reducir, disimular e intentar eliminar las líneas de expresión, no os perdáis esta entrada en la que veremos los ingredientes, la elaboración y la aplicación.
Ingredientes
· 1 tomate
Elaboración
Ya veis que los ingredientes no son muchos, y es que tan solo necesitamos un tomate para llevar a cabo esta mascarilla de frutas. Lo primero que debemos hacer es lavar y pelar el tomate. Cuando pelemos el tomate, lo cortaremos en daditos y le quitaremos las semillas del interior.
Una vez despedazado, lo trituraremos hasta forma una especie de papilla, que es cuando estará listo para ser aplicado en el rostro.
Aplicación
Lo aplicaremos con cuidado, o bien por todo el rostro o bien por las zonas a tratar, como vosotros queráis, esto es opcional, y dejaremos esta mascarilla durante, al menos, 15 minutos.
Una vez pasados los 15 minutos, procederemos a retirar la mascarilla de tomate con agua bastante fría, y luego os deberéis echar vuestra crema hidratante habitual.
Esta mascarilla se puede repetir dos veces por semana, así que os recomiendo que la combinéis con alguna de las anteriores.