Hace algunos días, ni una semana, Orlando Bloom y Miranda Kerr, bueno, ellos directamente no, pero en su nombre, enviaron un comunicado diciendo que se iban a divorciar, que no querían ser más pareja, por cuestiones de agenda, según dicen, y que preferían dejarlo a seguir estando casados sin estar juntos, algo muy lógico por otra parte.
A pesar de la ruptura, también dijeron, en ese comunicado, que iban a dejar de ser pareja, pero no familia, ya que ambos se quieren, se respetan y se sienten orgullosos el uno del otro, como es normal, además de que con un hijo en común lo peor que se puede hacer es poner tierra de por medio.
Dicho y hecho, y es que hemos podido ver, ni una semana después de este comunicado, a Miranda Kerr y Orlando Bloom paseando por las calles de Nueva York junto a su hijo, Flynn, suponemos que preparando todo para el día de Halloween, que se avecina dentro de poco (de ahí el cubilete de calabaza, ¿No creéis?). El caso es que se nota que estos dos artistas se respetan y se quieren, y quieren seguir llevándose estupendamente, siendo una auténtica familia, y es que, como podéis ver, incluso Orlando le pasa la mano por el hombro, un gesto muy familiar, ¿No pensáis vosotros?
El caso es que, a pesar de la triste noticia del divorcio, parece que la familia entera lo lleva muy bien y esto es algo que pocas veces podemos ver entre los famosos, y en general, para ser sinceros. ¿Qué os parece a vosotros? Lo repito y lo repetiré siempre, me encantan estos dos.