Hemos llegado a una época del año en la que la calabaza es una auténtica estrella. Cerquita ya de la fiesta de Halloween, el naranja marca tendencia en los platos y en nuestra cocina. Así que dejémonos inspirar por las recetas de mercado y salgamos a aprovisionarnos de ingredientes frescos para una de las sopas más famosas de la gastronomía europea.
La Crema de Calabaza es ideal para cualquier época del año, pues admite el ser ingerida tanto como gazpacho fresco como una sopa calentita, reconfortante y gustosa a nuestros estómagos, más fríos conforme nos vamos acercando al invierno. Es suave y también goza del favor de los más pequeños de la casa.
Si a todas estas bondades le añadimos la facilidad con que se prepara y lo económica que resulta, lo cierto es que no encontramos ninguna razón para no tomarnos un buen tazón de esta deliciosa crema de hortalizafresca.
Ingredientes:
- 1 calabaza mediana
- 1 vaso de leche
- nata líquida
- caldo vegetal
- aceite de oliva
- sal y pimienta
Elaboración:
Pon la calabaza, pelada y bien limpia, en una olla con agua caliente, una pastilla de caldo vegetal y un chorrito de aceite de oliva, hasta que la hortaliza esté blandita y bien cocida.
Pon la calabaza cocinada en la batidora y añade el vaso de leche. En este punto a muchas personas les gusta poner un quesito en porciones y un poco de nuez moscada y aunque a mí me gusta muchísimo el sabor natural de la calabaza, ésta no es una mala opción y es otra manera de enriquecer nuestra crema.
Batimos todo muy bien y repartimos en cuencos. Salpimentamos a gusto y decoramos con un chorreoncito de nata líquida. También podemos agregar unas pipas de calabaza fritas.