A pesar de que parecía que la separación entre Patricia Conde y Carlos Seguí iba a ser sencilla, sin muchos problemas, parece que no, que vamos a tener separación para rato. Verdaderamente, no sabemos lo que ha pasado entre ellos, ni parece que lo vayamos a saber, pero cuando involucran al pequeño, ya es otro tema.
La cuestión es que, según parece, Carlos se está llevando la peor parte de esta separación, y es que Patricia le ha privado, según parece, recuerdo que no lo sabemos con exactitud, de ver a su hijo. Estas son las palabras que pronunció Carlos delante de la puerta de Patricia:
¡Quiero ver a mi hijo. Quiero ver a Lucas! En 35 días sólo he podido ver a mi hijo siete horas y en unas condiciones pésimas.
A pesar de esto, y de las horas que pasó delante de la casa, terminó por marcharse sin ver a su hijo. La cuestión es que, según dice Patricia, no es que no deje a Carlos ver a su hijo, sino que el pequeño estaba muy enfermo. Aquí la aclaración:
Y es que cuando tu bebé tiene fiebre por primera vez te asustas mucho. He tenido que ir en dos ocasiones esta semana por la fiebre que tenía mi hijo causada por una laringitis aguda. Y allí estaba yo, en la sala de espera angustiada. Quítele la fiebre y la tos de perro viejito, por favor, que me muero de la pena de verle tan decaído.
Aún así, esto no me parece un motivo justificable por el cual Carlos solo haya visto a su hijo solo 7 horas en estos días. ¿Qué os parece a vosotros?