Los periodos de vacaciones suelen acumular momentos en los que se descuidan los hábitos de alimentación; comidas copiosas y a deshoras, además de descompensadas, seguidos de largos periodos en ayunas debido a la sensación de haber comido en exceso, son algunas de las prácticas más comunes durante la época estival, acompañadas generalmente del abandono del ejercicio físico. «Como es lógico, en las vacaciones pensamos en disfrutar y relajarnos, lo que suele implicar saltarse la rutina diaria», explica Federico García Corral, manager de Infinit Fitness, «el mero hecho de acostarnos y levantarnos más tarde afecta a los ritmos biológicos, si esto lo juntamos a un cambio de dieta y actividad, está claro que nuestro cuerpo lo va a sufrir de una forma u otra».
En este sentido el experto de la red de gimnasios apunta a dos problemas recurrentes tras la vuelta del verano: el sobrepeso y el estrés. «Por fortuna, la solución para ambos es común», afirma Federico García, «y no es otra cosa que adoptar nuevamente una rutina saludable en nuestra vida diaria, es decir, ejercicio y buena alimentación, adecuándolos a las circunstancias individuales de cada uno».
En palabras del miembro de Infinit Fitness, las dos claves para ambos aspectos también son las mismas: «apostar por la variedad y evitar los excesos. Así en el plano de la nutrición intentaremos repartir la ingesta en cinco comidas diarias, consumiendo en total al menos cinco piezas de fruta y verdura, dos raciones de productos lácteos, preferentemente desnatados, y una de frutos secos, e hidratándonos adecuadamente; semanalmente hay que consumir al menos dos raciones de pescado y marisco; por otro lado, hay que evitar las grasas saturadas, la sal y los azúcares, mientras que para conseguir saciarnos sin excedernos, la fibra es nuestro principal aliado».
En cuanto al aspecto físico, Federico García recomienda «comenzar el entrenamiento cuanto antes, pero sin atropellarse, partiendo de la premisa que los primeros días no vamos a rendir igual que lo hacíamos antes. A todos nuestros clientes les recomendamos una serie de entrenamiento adaptada a su condición y necesidades, así se aseguran que con media hora de ejercicio al día recuperan de nuevo la figura en muy poco tiempo, sin riesgo de lesionarse por un esfuerzo excesivo. Esto contribuirá a que nuestra autoestima no sufra por ese síndrome ‘postvacacional’, y que estemos centrados al retomar las labores diarias».